Los curas villeros hacen campaña proselitista. Difunden un tendencioso comunicado contra La Libertad Avanza
Los curas villeros hicieron público un comunicado con evidente intencionalidad política. Arrogándose un rol que no les corresponde se apropiaron del observatorio de moralidad.
Expresiones del Padre Charly, Carlos Francisco Olivero, Cura Villero de la Diócesis de San Justo (La Matanza, provincia de Buenos Aires)
Repudiamos las propuestas de la fórmula de la Libertad Avanza (LLA) por inmorales, en horas tan dramáticas para nuestro país”. De esta forma, destacó que la venta de niños y órganos, la reivindicación de la última dictadura cívico-militar y la desvalorización de los héroes de Malvinas, son “una barbaridad”. Además, señaló el desprecio a la justicia social y a la pobreza y que esta fórmula “pone en riesgo a la democracia”.
Contradictorios y polémicos, no desaprovechan oportunidad para ensanchar las grietas que fraccionan dramáticamente a una sociedad cada vez más confundida.
CURAS VILLEROS “COMPAÑEROS”
El libre albedrío y la libertad de expresión les corresponde. Es decir, tienen el derecho de elegir por sí y de opinar. Inclusive ratificar en hechos y palabras su militancia.
Sin embargo, en ejercicio de su rol social y pastoral y ostentando la condición de custodios de la fe, se arrogan la facultad de juzgar y calificar a un candidato a Presidente. Es un gesto temerario y cuestionable.
La preocupación de los curas villeros compañeros no es ilegal. Pero sí sesgada y mal intencionada. La subjetividad manifiesta del comunicado roza la ilegitimidad.
No son los dueños de la verdad. Mucho menos de la palabra santa. Han demostrado una parcialidad injustificada en reiteradas ocasiones. Perdonando a algunos y, condenando moral y espiritualmente a otros.
Pero, frente a hechos obscenos e inmorales que se ejecutan ante sus ojos, no se los escucha alzar su voz para la crítica ni emitir un comunicado de repudio.
Son los mismos que pretenden mostrarse como justos e infalibles opinadores pero, en estas circunstancias, se manifiestan políticamente correctos. Insinúan a quien votar, crucificando a quien no votar.
INTERPRETACIÓN EQUIVOCADA
Los curas villeros omiten adrede mencionar que:
- La venta de niños o el tráfico de personas existe hace siglos. No es, ésta deleznable actividad, propiedad intelectual de La Libertad Avanza.
- La venta o el tráfico de órganos es un delito. Y los marcos jurídicos para la donación y trasplante, como toda norma jurídica es perfectible y corresponde al poder legislativo modificar o mantener el status de la norma en vigencia. No es una potestad del candidato a Presidente de La Libertad Avanza imponer resoluciones en contraposición a la norma.
- No se reivindica la dictadura. Se cuestiona al Estado por su inequidad manifiesta al no reconocer a las víctimas de la subversión sus derechos humanos.
- Los ciudadanos argentinos que entregaron su vida sacrificándose por la Patria en la gesta de Malvinas no son argumento adecuado para gestar relatos ideológicos en la previa de una elección.
LA REALIDAD NO USA SOTANA
Los curas villeros no parecen incomodarse con la corrupción imperante. Sobre todo en los distritos donde ellos mismos luchan cotidianamente contra la miseria; la marginalidad; el tráfico de drogas; la prostitución; la condición de cautivos que los pobres soportan por algunas migajas que el poder político les otorga; y hay muchas otras situaciones que hace décadas condicionan la eficiencia y materialización de la justicia social.
Ni La Libertad Avanza, ni la fórmula Milei – Villaruel fueron gestores, administradores, operadores o beneficiarios de la maquinaria política y estatal responsable de la decadencia institucional o peor, de la precarización existencial de los necesitados y desposeídos.
Los curas villeros compañeros saben perfectamente quienes son los responsables de imponer y beneficiarse con la esclavitud democrática y de condicionar la independencia y libertad de cada ciudadano.
Son, al igual que ellos, los que reivindican al Estado como el Paraíso perfecto. Olvidando que muchos de los que gestionan el Estado abusan del poder delegado y se convierten en millonarios de la noche a la mañana. O construyen imperios de dominio y corrupción, haciendo de las instituciones de cada ciudad o provincia, parcelas de feudo.
NO SABEN LO QUE HACEN…
O sí. Militan. Y disfrazados de hombres de fe omiten el digno gesto de respetar a los demás. Ningún Dios, ni siquiera el de ellos, evitaría la bondadosa actitud de permitir que el ciudadano sea libre de elegir sin la intromisión de quien regentea el confesionario.
Elegir un Presidente no tiene nada que ver con la fe. Los curas no tienen funciones de punteros políticos. Y si quisieran hacer política por decisión y vocación, recuerden a monseñor Joaquín Piña. No se queden solo en juzgar y criticar. Asuman la responsabilidad, si consideran que ustedes pueden mejorar algo y postúlense como candidatos.
No recen por la Patria. Hay una mayoría de ciudadanos que sabrán protegerla. Recen por ustedes mismos para que los argentinos les disculpen su irresponsabilidad manifiesta y su subjetividad proselitista.
Porque ni Dios ni la Patria los va a demandar…
