UN JUEZ PARA TODOS

Gustavo Fresneda es casi Juez Federal. La Comisión de Acuerdos del Senado le dio vía libre a los deseos de todos los sectores. Festeja la mayoría. Martínez Llano, resignado.

¿Soy amigo del Juez? No. Preferiría ser amigo de los Senadores. Y aunque la introducción insinua un deseo, es en realidad un cuestionamiento al dicho “Hacete amigo del Juez…”. 

Parece, y los hechos lo demuestran, que el “colegiado” tiene la habilidad de convertir en Juez todo lo que toca. Y un Juez, vale oro.

Si está bien o mal, es un nudo gordiano que deberán desatar los Senadores. Si les interesa. Algo que parece improbable, puesto que la “magia” del misterio, pone en manos de la política el destino de un poder de la República que debería aparecer como independiente absoluto de los restantes poderes.

TODO LLEGA…

Y llegó el “acuerdo” para Fresneda. Algo que anticipamos hace casi un año –ver-. Vale recordar, que no se trata de futurología, apenas un ejercicio de análisis político. Porque la designación de un Juez es un acto político, por sobre todas las consideraciones, previas o posteriores.

El candidato propuesto por el Presidente Mauricio Macri llegaba impulsado por un aliado correntino, que inclusive recibió el respaldo casi impensado de un “chamigo” opositor. A veces, los intereses unen, aunque las disputas hayan sido impiadosas. En otros tiempos. Con distintas necesidades.

Ricardo Colombi y Carlos “Camau” Espínola, convergieron en un mismo objetivo. Está hecho. Es lo que importa. Los detalles y justificaciones sobran.

JUSTICIA AJENA…

Rodolfo Martínez Llano lo intentó todo, hasta pretender hacer uso de la palabra en la sesión de la Comisión de Acuerdos, intención que fue acotada por el Presidente de la Comisión, y la presencia casi amenazante de los custodios del Senado. El líder de “Vamos Compañeros”, tuvo que conformarse -por ahora- con mirar desde la “tribuna”, callado y con tarjeta amarilla.

Martínez Llano marcó presencia en la sesión

Fue un trago amargo. Pero siempre hay revancha, pensará el dirigente que en breve, dará batalla para consagrase como conductor del PJ correntino. 

Tendrá que asimilar rápidamente el golpe que le asestó el estratega Colombi, su aliado en las sombras, para algunas cuestiones. Hoy, ya están empatados, o casi. 

PARA ARCHIVAR

Es cierto que a muchos ciudadanos comunes, ésta noticia, no les cambia en lo más mínimo la tragedia o el paraíso de su día a día. Pero, sin embargo, es útil presenciar los casi veinte minutos del vídeo de la sesión. A pesar de que dura menos que el capítulo diario de una novela, en éstas escenas se pueden percibir, confirmar y descubrir que vale -y mucho- ir develando cómo se manejan nuestros representantes. 

 Si no entiende alguna parte, no dude en preguntar a alguien que se lo pueda explicar. No es impropio pensar que el ciudadano debe aprender a interpretar para su beneficio, tres cuestiones fundamentales:

  1. Los jueces, no son designados por méritos, aunque los tengan.
  2. Ninguna prueba es suficientemente sólida. El colegiado, por mayoría, es soberano.
  3. En política, los acuerdos, no necesitan ser fundamentados.

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