
ELLA NO CREE EN CASUALIDADES
Ella no cree en casualidades. Tampoco los que construyen poder. Y, por si fuera poco, el análisis está exento de elementos casuales
La doctora honoris causa no cree en casualidades. Una expresión que la equipara a todos los caciques políticos. Sin embargo, su alocución sin filtro y sin ayuda memoria, la posiciona en un nivel inmediatamente superior al conjunto de mediocres que pululan en el ámbito político y dirigencial de éste bendito país que todavía gatea institucionalmente. A pesar de los años y de las promesas.
Ella, culpable o no, sigue siendo auténtica. No en vano pone "la cara, el cuero y la firma". Está diciendo que el o los errores cometidos no son anónimos. Fiel a su estilo, determinante, el infierno o el paraíso de manera simbólica son producto de sus decisiones.
ELL...